Allá, cerca de mi shampoo y mi bata de toalla, te quedas sentada, mirándome. Debo quitarme la ropa, estoy por entrar a la ducha. No te marchas; me sorprende cómo te armas de paciencia. Decido ignorarte. Cubro mi cabello con el gorro plástico azul, me libero de las últimas prendas y doy paso a la lluvia. Entonces, sé lo que estás buscando con tu astucia felina. Pero es tarde, tomas mi colgante de cristal con los dientes y corres lejos del baño.
***
Palabras del reto de este mes: Gorro, armas, allá.
Micro para el reto Cinco líneas de noviembre de Adella Brac. Visiten la comunidad cincoliniera, ahora tiene casita propia en la web.
Interesante y también intrigante.
ResponderEliminar¿Tiene sentido que piense que la ladrona es una gata?
Besos
Seguro que ese colgante trae al menino por la calle de la amargura... jajaja
ResponderEliminarMuy bueno!
Muy bien empleadas las palabras del proyecto. Un abrazo
ResponderEliminarWow, hipnotizante, creada en una atmósfera de suspenso.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Jajaja, me dio mucha gracia el final (me ha recordado a mis gatas, que dejas algo a su vista y ahí van a jugar con ello). Muy bonito microcuento.
ResponderEliminarMuchos ánimos con todo, Cyn.
Abrazos desde Escapando al bosque.
Precioso post. Miraré el blog de las cinco líneas.
ResponderEliminarUn abrazo
Ja, muy bueno. Desde la primera frase me preguntaba quién o qué sería
ResponderEliminar